
PALABRAS DE AMOR
1º A
Los alumnos de 1º A han elaborado una serie de relatos amorosos con motivo del día de los enamorados. Esperamos que os gusten.
AMOR EN EL AIRE
Érase una vez dos jóvenes llamados Alicia y Hugo. Alicia tenía 16 años y Hugo 18.
Ellos se conocieron en el instituto porque les tocó en la misma clase. No se hablaban porque les daba mucha vergüenza a los dos, hasta que un día dieron el paso y hablaron y se pusieron a contarse cosas de sus vidas. Hugo le pidió salir a Alicia porque pensaba que tenían mucho en común.
Quedaron en el parque y en uno de los bancos se sentaron los dos contemplando la puesta de sol, se miraron y se cogieron de las manos y cuando se iban a dar un beso, de repente, sonó el despertador y Alicia se despertó. Todo había sido un sueño.
Al día siguiente cuando Alicia iba al instituto se encontró a Hugo y se fueron los dos paseando tranquilamente y en ese momento Hugo le pidió salir a Alicia y ella le dijo que sí.
Por la tarde se encontraron y se tomaron un helado y se sentaron en el banco y al final se dieron un beso, prometieron que nunca se iban a olvidar y permanecieron juntos para siempre.
FIN
Belén Cabello
Lucía Calvo
París, una historia de amor
Todo empezó en París, la ciudad del amor. Marcos estaba en Sevilla cuando de pronto sus padres le dijeron que se iban a París para celebrar su confirmación.
Al llegar, se instaló junto a sus padres en un hotel de cinco estrellas. Ya terminada su instalación, decidieron ir a Disneyland París, para disfrutar de la adrenalina corriendo por sus venas. Marcos se fue por su cuenta y se montó en la montaña rusa ”Montaña rusa del Rock”. Cuando salió de la atracción fue al médico porque se sentía mareado.
En el medico conoció al que sería el amor de su vida, se llamaba Paula.
Paula curó a Marcos y quedaron para tener su primera cita en el restaurante de lo alto De la Torre Eiffel.
Marcos fue al hotel, se puso su smoking, gomina y se fue. Al llegar subieron a la torre Eiffel y pidieron una tabla de quesos de leche de los Alpes, de segundo una bagette de pizza y de tercero un plato de spaggueti con albondigas suizas. Cuando solo quedaba un espagueti en el plato, sin darse cuenta se lo llevaron los dos a la boca y se besaron.
Se marcharon y quedaron para despedirse al día siguiente. Cuando pasó la noche, Marcos se despertó y buscó a Paula en el museo del Louvre. Allí se despidieron.
Cuando Marcos llegó a Sevilla tuvo una vida normal hasta que al pasar los años volvió a París. Allí se hizo un reconocimiento médico y la médica era Paula. El reencuentro fue indescriptible. Al pasar un mes se casaron y tuvieron dos hijos mellizos: George y Sofía. Marcos y Paula decidieron mudarse a un chalet junto a la playa de Marsella y allí los cuatro vivieron felices para el resto de su existencia.
Juan Carlos P. y Carlos R.
15 DÍAS DE VERANO
15 DÍAS DE VERANO
Estaban metiendo las maletas en el maletero para irse 15 días a la playa. El camino fue un poco pesado porque tenían intriga por saber cómo sería el sitio al que iban a ir.
Cuando llegaron, los padres se fueron a una habitación y las niños a otra. Entonces los niños soltaron las maletas y bajaron a la piscina.
Allí se encontraron a un grupo de niños que estaban jugando al marco polo. Entre esos chicos conocieron a un niño llamado Jaime. Jaime es un niño de unos 2 años, pelo castaño, ojos marrones y delgado. La madre de Jaime les presentó a Estefanía y Manuel. Estefanía es rubia, ojos azules, delgada y alta. Manuel tiene el pelo castaño, ojos marrones, delgado y bajito.
Los niños del grupo y se pusieron a jugar. Al día siguiente conocieron a unos ingleses llamados Ronald, Jake, Connor y Rory. Ronald es de estatura media, ojos marrones, castaño y delgado. Jake es alto, ojos marrones, castaño y delgado. Rory es de pelo castaño, ojos azules, alto y el pelo rizado. Connor tiene el pelo castaño, ojos azules, alto y delgado. Luego se fueron a sus casas a comer. Más tarde bajaron a la piscina y luego el grupo de niños empezaron a jugar con Ronald.
Ronald se enamoró de Estefanía y quedaron un día por la noche y se sentaron en un banco que había por la urbanización. Estefanía no sabía que Ronald la quería. A ella también le gustaba. Se cogieron de la mano y hablaron un poco hasta conocerse y cuando ya cogieron un poco de confianza, Ronald le dijo a Estefanía que él le quería. Ella no sabía qué decirle porque estaba muy agobiada.
Luego bajaron Laia, Julen, Irati, Aimar, Elio y Hugo. Laia es rubia, de ojos verde, alta y delgada, Julen es bajito, moreno, de ojos verde y delgado, Irati es de pelo castaño, alta, ojos verde y delgada, Elio es rubio, alto, ojos verde y delgado, Hugo es bajito, castaño, ojos marrones y delgado. Y empezaron a jugar a pilla pilla y al escondite…
Al día siguiente Ronald le preguntó a Estefanía que si ya se lo había pensado. Estefanía dijo que sí y se fueron para un banco que había detrás de la pista de tenis para hablar tranquilamente. Le dijo que sí iba a salir con él, se cogieron de la mano y se fueron camino a la piscina donde estaban todos sus amigos.
Ya se hizo de noche y cada uno se fue a sus casa a ducharse porque esa noche iban a cenar a casa de Elio. Todos quedaron en un sitio para irse a casa de Elio. Cenaron pizza y como siempre bajaron a jugar un rato pero ese día Ronald cogió a Estefanía de la mano y se fueron a un bloque para que nadie lo viese. Ronald se lanzó para darle un beso a Estefanía y luego salieron para que nadie se extrañase. Más tarde todos se fueron a dormir y se quedaron solo Ronald y Estefanía. Se besaron bajo la luna llena y el cielo estrellado.
El penúltimo día era el peor porque no se iban a ver más hasta el verano que viene. Ronald era de Irlanda y Estefanía era de Sevilla. Erna los peores días para ellos dos, pero también para los otros niños. Solo faltaban dos días para irse cada uno a su país. Lo único que les quedaba era disfrutar del tiempo que quedaba para estar juntos y pensar en los buenos momentos que habían pasado ya que quedaba muy poco para irse.
La última noche iban a cenar todos juntos afuera. La noche fue muy chula y emocionante. Todos se fueron a dormir porque el día siguiente iba a ser muy duro para todos para despedirse. La mañana siguiente iba a ser el último día y el más triste de todos. Llegó la hora de despedirse y Ronald y Estefanía se dieron el último beso del verano. Todos estaban llorando, incluidos Ronald y Estefanía. y se fueron con mucho vacío.
MARÍA DE LOS ÁNGELES MIJE Y ANA MARTÍN
La dura historia de Mamadou
Una niña llamada María, de 16 años llevaba una vida normal y corriente, hasta el 15 de septiembre, cuando entró en el instituto.
El instituto era bastante chico: de dos clases por curso, un gimnasio y un patio bastante pequeño. Justo en ese día conoció a un chico que venía de otro país. Mamadou se llamaba. Era un chico de piel negra, alto, alegre y simpático.
Durante la primera semana María fue descubriendo cómo era Mamadou y le encantó, más bien se enamoró. La segunda semana se fue con las amigas para disimular que no le gustaba. Y por último la tercera semana María se le declaró, él dijo que no por ser una chica de piel blanca pero como persona era encantadora.
Cuando intentó olvidarlo apareció un chico llamado Alfredo. Alfredo es bajito, enfadón y charlatán. Él se enamoró de ella, y se le declaró. Ella no tenía más remedio que decirle que sí para olvidarse de Mamadou (relación falsa).
Pasaron unos meses y Mamadou reflexionó y vio que en el amor no tiene importancia el color de piel. Mamadou se le declaró a María y ella no pudo evitar decirle que sí. Le explicó todo lo sucedido a Alfredo, él se quedó boquiabierto. Pasaron unas semanas, Alfredo seguía triste y justo en su peor momento apareció Berta, la mejor amiga de María. Berta es una persona fuerte, dura pero risueña. Ella le ayudó mucho con lo ocurrido y se cogieron tanto cariño que se enamoraron.
A María y Mamadou le parecían una pareja estupenda. Y se llevaron tan bien los cuatro, que celebraron al cabo de los años la boda juntos. Fueron en la luna de miel a Cancún.
Pasaron varios meses y María se quedó embaradaza. Los primeros meses fueron muy bien hasta que un día María venía de hacer la compra y la atropelló un coche. Estaba en coma y solo había dos opciones: salvar al niño y moriría María o no hacer nada por el niño y salvar a María. Decidieron matar a María y sacar al niño, aunque el niño salió con defectos.
Mamadou estaba por una parte contento porque era padre y por otra parte triste porque María había muerto. Fue recogiendo todo y despidiéndose de sus amigos para irse a su país y criar allí a Samuel (piel mulata).
Al fin y al cabo fueron felices y comieron perdices.
Manuel Bizcocho y Eduardo Amado
LE FRANCE
La historia empieza en una pista de patinaje sobre hielo en París. María se cayó y Alejandro la vio y le ayudó a levantarse. Ellos notaron el amor. Eso quedó en el olvido. Diez años después se volvieron a ver en un restaurante llamado “Le France”. Él era el camarero del restaurante. Ella le pidió la comida y cuando se dieron cuenta de quiénes eran, ellos hablaron, comieron, recordaron el momento y se dieron el número de teléfono.
Cada uno siguió la vida por separado, Al cabo de un tiempo, él se acordó de su número y le pidió a ella si quería salir esta noche. Ella le dijo que sí.
Cuando llegó la noche fueron a la pista donde se conocieron, y se enamoraron, se dieron su primer beso. Eso no funcionó y cada uno se fue por su lado. Once años después se volvieron a encontrar en la Torre Eiffel cada uno con su familia. Cada uno presentó a su familia. Decidieron conocerse mejor y se volvieron a enamorar. Todo empezó de nuevo. Seis meses después se casaron y tuvieron dos hijos: un niño llamado Antoine y su hermana llamada Claire.
Mariano Fuentes y Andrea Soriano
LA PAREJA PERFECTA
Leticia y Andrés paseaban por el parque. Todo el mundo se fijaba en la más popular, Leticia. Era una niña guapa y muy alta. En la cara resaltaban sus ojos azules, sus labios oscuros y sus mejillas sonrojadas. Además, lucía un vestido corto a juego con sus tirabuzones dorados. Andrés no era tan popular, ni era tan guapo, pero tenía un corazón puro y enorme.
Ángela estaba leyendo en el parque, cuando los vio pasar. Ángela era una chica bella y tenía un rostro pálido, donde resaltaban sus labios rojos y brillantes. Llevaba unos vaqueros y una camiseta corta, y tenía un buen corazón.
Leticia veía que Andrés poco a poco se interesaba por el estado de ánimo de las otras chicas. Y Leticia sentía envidia, así que por azar eligió a una chica tímida e insegura, Ángela, para hacerle la vida imposible.
Andrés notaba algún cambio en Leticia, con lo que cada vez se preocupaba más por ella.
Ángela se iba a llorar a una esquina del patio sola, hasta que se cruzó con Andrés y este preocupado la quiso ayudar pero ella no le quería decir qué le pasaba.
Un día descubrió a Leticia pegando en un pasillo a Ángela. Y saltó diciendo:
“Andrés”: Leticia, ¿qué haces?, ¿eres consciente de lo que quieres hacer?
“Leticia”: Ángela, ¿se lo has dicho tú?
“Ángela”: ¡No!
“Andrés”: No, pasaba a buscarte, cuando he escuchado llantos. Esto se acabó. Has llegado demasiado lejos. Entre tus celos y esto, eres una persona sin sentimientos.
Dicho esto, Andrés cogió de la mano a Ángela y la acompañó a curarse las heridas.
Andrés poco a poco fue acercándose a ella y quedaban por las tardes. Él se estaba enamorando de Ángela, y a ella le estaba pasando lo mismo. Hasta que un día, viendo una puesta de sol, Andrés le tapó los ojos y le puso un anillo en la mano y cogió unos carteles donde ponía si quería salir con él. Ella reaccionó con un salto sobre él y le dijo chillando ¡sí! Se pegaron las caras y apareció un roce de labios que terminó en un enorme beso.
PAULA ROMERO Y PAULA MORENO
AMORES INDECISOS
Blanca y las amigas se iban de viaje a Berlín. En el avión a todas sus amigas les tocó sentarse juntas menos a ella. A Blanca le tocó al lado de un chico. Él se llamaba Nial, era de pelo castaño y con ojos verdes, alto y muy apuesto. A Blanca le daba vergüenza hablarle y mirarle. A lo largo del viaje se le quitó la vergüenza y se hicieron muy amigos. El avión tuvo que parar en otra estación y tuvieron que alquilar una habitación. Ellos se quedaron juntos en la misma habitación. Tras una noche de hotel cada uno se fue para su destino. Blanca le dio su número de teléfono a él. Ella estaba desesperada porque no le llamaba. Durante el viaje no quería salir ni hacer nada y las amigas le preguntaban que qué le pasaba. Ella solo decía que le dolía la cabeza, le daba vergüenza contárselo a sus amigas. Al fin volvieron a España.
Ella vivía en las montañas en una casa de madera, tenía dos plantas, la de abajo tenía dos ventanales. Ella se acordaba mucho de Nial y miraba el teléfono pero nada. Al pasar un mes se echó un novio que se llamaba José y él la quería muchísimo. Blanca se dio cuenta de que estaba embarazada al poco tiempo. A los seis meses tuvo al niño al que llamaron Mateo. Pasaron ocho años de felicidad en familia. Ella se olvidó del muchacho del avión. José enfermó y a los tres años de averiguarle la enfermedad falleció. La familia estaba muy triste.
Por otro lado, Nial dejó a su novia porque se había acordado de Blanca. Estuvieron hablando por teléfono y volvieron a enamorarse. Entonces quedaron en el pueblo de Blanca. Al llegar vio a Mateo y se vio a él de pequeño. Entonces se dio cuenta de que era su hijo y se lo dijo a Blanca, pero ella, indignada, dijo que no, que él era hijo de José. El muchacho se hizo las pruebas de paternidad pero antes de saber la respuesta se tuvo que machar sin decir nada. Blanca se enteró del resultado y salió que sí era su padre. Llamó a Nial diciéndole que volviera a estar con su hijo y él respondió que cogería el primer avión y al amanecer estaría allí. A la mañana siguiente no encuentran a Nial. El hijo encendió la tele y dijo: -¡Mira es Nial¡ pero está muerto.
La madre respondió: -Si no hemos podido estar juntos en esta vida lo estaremos en la otra.
Ángela Grau y Amparo Infante
UN AMOR INESPERADO
María era una mujer delgada, guapa y moderna. Fernando era una persona normal pero con carácter serio. María y Fernando eran vecinos en un hotel, no se conocían mucho pero Fernando estaba locamente enamorado de ella.
Un día, se le ocurrió hacer un pequeño agujero en la pared para poder verla. Eso le trajo como consecuencia saber que ella tenía pareja. Entró en una depresión y antes de tapar el agujero miró por última vez. Ella estaba tumbada en su linda cama llorando. Entonces él se preguntó:
-¿Por qué llorará una mujer tan bella como ella?
Él sin pensarlo dos veces fue y llamó a su timbre. Le abrió su pareja. Parecía enfadado y tenía aspecto agresivo. Fernando se asustó y le preguntó por qué su pareja estaba llorando. Él respondió dándole un empujón y diciéndole que no era asunto suyo. Fernando se cabreó y lo empujo chocándolo contra el pomo de la puerta de la cocina y dejándolo inconsciente.
Fernando vio a María llorando desconsoladamente y aprovechó para decirle lo que sentía por ella. El novio volvió en sí y le atacó por la espalda. María le gritó que se agachase. El novio, llamado Gonzalo, salió huyendo, pero se resbaló y se cayó por las escaleras. Llamaron a una ambulancia y desde entonces no se supo más de él.
María supo que Fernando la amaba y que sería capaz de poner su vida en peligro por ella. Se estuvieron conociendo hasta los treinta y cinco años. Entonces Fernando pidió matrimonio a María. En un restaurante, le pidió al camarero que pusiera el anillo en el postre, María vio el anillo y Fernando dijo:
-¿Quieres casarte conmigo?
En un abrir y cerrar de ojos se despertó de aquel maravilloso sueño, pero alguien llamó a su puerta…
¡Era ella! Su sueño se hizo realidad y nadie los separo hasta la muerte.
Sergio Pérez y Pepe Gavira
LA LOCURA DE AMARSE
María era una adolescente muy rebelde, tenía quince años y sus padres la mandaron a un internado por su mal comportamiento.
Cuando llegó al instituto no conocía a nadie, pero un grupo de amigos la invitó a que se uniera a ellos y ella aceptó. Ese grupo estaba formado por Laura, una chica tranquila pero sentimental; Pedro, un chico fuerte y chulo por fuera pero débil por dentro y Manuel, que era el mejor amigo de Pedro desde pequeño y los dos tenían la misma personalidad.
Al principio María era tímida pero al cabo de unas semanas eso desapareció y era una chica completamente diferente. Una noche se unieron todos en la misma habitación para contar sus secretos y en ese momento surgió el amor porque confesaron lo que sentían el uno por el otro. Pedro le pidió salir a Laura y Manuel a María.
Pasado un mes María descubrió que Ángel, un chico machista y sin sentimientos sentía algo por ella aunque ella lo odiaba. En ese momento, Laura descubrió que sentía cosas por María, aunque para disimular seguía con Pedro y Manuel descubrió que sentía cosas por su mejor amigo desde hace tiempo, pero al igual que Laura lo ocultaba con María.
Una noche Manuel fue a la habitación de Pedro y lo besó, él despertó y tras unos minutos hablando sobre lo ocurrido los dos aclararon que se amaban. Volvieron a cruzar las miradas y lentamente unieron sus labios.
Al día siguiente dejaron a sus parejas, las cuales, hablaron sobre lo ocurrido y al terminar la conversación, dijeron a la misma vez:
-Te quiero-
También habían descubierto su amor y decidieron intentarlo. El grupo siguió adelante pero ocultando las parejas.
Unos días después llegó una chica nueva al internado. La niña se llamaba Olivia. Tenía doce años y era muy tímida, estudiante y le encantaba la música clásica pero era de enfado fácil y cuando se enfadaba…
La chica se encontró con María y le explicó algo que María no sabía ni se habría imaginado que pasaría y era que sus padres se habían separado porque su madre había engañado a su padre con otro hombre, que era el padre de Olivia.
María al principio despreciaba a Olivia porque ella no aceptaba lo de sus padres y también porque se podría enterar de su relación con Laura, pero una semana más tarde María se dio cuenta de que ella nunca había tenido una hermana pequeña y decidió darle una oportunidad.
Con el tiempo, María le confesó a su hermana lo de su relación y Olivia le respondió que ella la quería igualmente.
Una noche volvieron a reunirse todos en una habitación pero esta vez también estaba Olivia y se estaban preparando para despedirse porque María volvía a casa con su familia pero ella no quería dejar a Laura porque por fin había encontrado a una persona con la que estaba a gusto.
A la mañana siguiente, cuando ya se iba con su madre que venía a recogerla junto a su pareja, María le pidió a Laura que se fuera con ella y serían felices. Ella respondió que no pero con los ojos llenos de lágrimas se lo pensó y respondió que sí.
Al fin Laura y María se fueron juntas y Manuel se quedó junto a Pedro en el instituto. Ellos ocultaron su amor hasta que salieron del instituto. Fue entonces cuando se reunieron con sus amigas y se lo contaron todo.
FIN
Noelia Álvarez y Juan Miguel Baquero
CECILY
Eran las cinco de la tarde en la ciudad de Londres, faltaba una hora para que Cecily acabase su turno en la inmobiliaria cuando escuchó que llamaban a la puerta, debía de ser Paul, el nuevo trabajador. Cecily lo había olvidado, había quedado con él para enseñarle la empresa.
Se miró un segundo en el espejo antes de dejarle pasar, su pelo de un tono rubio espiga estaba perfectamente ondulado, caído sobre sus hombros y lo más importante, el maquillaje le cubría el rostro ovalado al completo.
-Adelante.- dijo Cecily.
El desconocido entró, aparentaba veinticinco años, dos menos que Cecily. Su pelo era castaño, tenía los rasgos faciales proporcionados y lo que más inpresionó a CECILY, sus ojos verdes penetraban en ella. Cecily se sintió incomoda al instante y se alegró cuando se despidieron al rato de hablar.
Aquel fin de semana, Cecily estaba en casa con su amiga Alice, que le reprochaba como siempre que se pusiese maquillaje para ocultar su verdadero rostro.
-Pero NO PUEDO ir al trabajop sin maquillaje, huirían de mí, Alice, nadie ha visto jamás mi verdadero rostro y te aseguro que no es agradable.
-¿Qué te ocurre en el rostro por qué lo ocultas siempre incluso a mí que soy tu amiga?-chilló Alice furiosa.
De pronto, vio lágrimas en los ojos de Cecily y la cosa quedó ahí.
Durante los cuatro meses que siguieron Cecily vio a Paul todos los días, y siempre ocurrió como en el primero, que se sintió penetrada por sus ojos, aunque ya no se sintió incómoda. Poco a poco Paul y ella fueron haciéndose buenos amigos y un día que Paul la invitó a cenar, Cecily aceptó.
Fueron a cenar a un pequeño restaurante rústico, hablaron un rato hasta que Paul dijo:
-Tienes algo en la cara.- Paul alargó su mano hacia Cecily que retrocedió asustada, pero no llegó a tiempo. Paul había descubierto su secreto, le había quitado el maquillaje, lo que dejó al descubierto su cara… completamente quemada.
Paul dijo:
-Lo siento Cecily, pero creo que es mejor que no nos volvamos a ver.
Al oír esto, Cecily huyó del restaurante hacia su casa. Se iría, se mudaría, a España mismo, donde se mostraría tal como era, fea, sin maquillaje, pero aun así, una persona.
Rocío Mayo
Inmaculada Toscacano
La grandiosa historia de Abduru
Hace 20 años había un hombre de Nigeria el cual se tuvo que ir a España ilegalmente por causas de alimento y trabajo.
Cuando llegó a España, no le quedaba dinero. Entonces la única opción que le quedó fue vender los pañuelitos. Uno de los días que estaba trabajando, una anciana sufrió un accidente. Él fue el único que acudió en su ayuda, la recogió y la llevó al hospital más cercano.
Cuando Abduru miró a aquella mujer que había rescatado pensó que estaba muerta porque tenía el rostro muy pálido, el pelo más blanco que nunca y su cara estaba más transparente que antes. Mientras esperaba la llamada del médico, cruzó una breve mirada con una chica hermosa, rubia, de ojos azules, de muy buen cuerpo y con el pelo ondulado. En ese momento, Abduru sintió un flechazo en el corazón.
En ese instante, el médico llamó a la señora a la que acababa de rescatar y aquella chica tan hermosa que acababa de ver se dio la vuelta y buscó la habitación de la señora. Al llegar a la habitación empezaron a hablar:
-¿Cómo te llamas?-dijo Abduru.
-Me llamo Amanda-dijo la chica -¿Y tú?-
-Yo me llamo Abduru-contestó él- ¿De qué la conoces?- dijo con curiosidad.
-Es mi abuela- contestó ella- ¿Y tú de que la conoces?-
-La rescaté cuando chocó- contestó él.
Ella lo miró con curiosidad y le dijo:
-Bueno ¿Cómo te lo recompenso?- dijo ella -¿Qué te gusta?-
-Me gusta el tenis- dijo cortado -pero bueno ¿Por qué lo preguntas?-
-Bueno ya que es tenis- dijo pensativa - Mi abuelo, su marido- dijo señalando a la señora -es el dueño de un club de tenis y el miércoles tienen un partido muy importante, pero no tienen personas para jugar, mañana podrías pasarte para ver si tienes talento.
-Vale- dijo no muy confiado-.
Al día siguiente fue al sitio que le indicaron. Cuando terminó la prueba le dijeron que tenía talento:
-¿Quieres venir el miércoles a jugar? -dijo el abuelo de Amanda
-Sí - dijo con orgullo.
El miércoles después de jugar, y de ganar 1-2 habló con Amanda y le agradeció lo que había hecho por él.
-Oye...Muchas gracias- dijo Abduru- Oye…¿Quieres salir conmigo?-
-Ummm…- dijo pensativa- sí, vale venga-
-Vale gracias- dijo Abduru.
Después de 10 años, 3 hijos, una preciosa boda, 3 bautizos y muchísimos partidos, Abduru fue un profesional y Amanda se convirtió en una prestigiosa Jueza española.
Leonardo Rico
Lucía Vélez
LA HISTORIA DE AMOR UN POCO INESPERADA
El día 19 de julio en París, María se enamoró de Pablo y su mejor amiga Marina también.
María era muy tímida, todo lo contrario a Marina. Entonces Marina se lanzó y le pidió salir, Pablo le dijo que sí aunque él quería a María.
María cuando se enteró se enfadó con Marina. Semanas después Pablo cortó con Marina para pedirle salir a María, pero ella le dijo que no porque estaba muy mal lo que le había hecho a su amiga.
Marina le pidió perdón a María y le dijo que si quería a Pablo que saliera con él. Entonces volvieron a ser mejores amigas.
Los padres de las dos chicas planearon un viaje a Sevilla. Días después cogieron el avión, y al bajarse vieron dos onubenses muy guapos llamados Gonzalo y Daniel.
Ellos iban al mismo hotel y dio la casualidad de que estaban en la habitación de al lado. Ellos se habían enamorado de las chicas. Un día bajaron a la piscina y estaban los chicos. Empezaron a hablar con ellos hasta que Gonzalo se llevó a María a una esquina para hablar con ella y a los pocos segundos Gonzalo le pidió salir. Ella le dijo que sí, en ese momento Marina también estaba sola con Daniel y surgieron algunas chispas entre ellos.
Cuando Gonzalo y María volvieron de la mano, vieron a Marina y a Daniel dándose un beso, María y su pareja se miraron muy sorprendidos puesto que cada uno de los chicos estaba con una chica.
Al día siguiente amanecieron los chicos llorando porque ya se iban las chicas. Estuvieron un rato hablando y escucharon algunas que otras palabras en la conversación de los padres, tanto de las chicas como de los chicos.
Se llevaron una sorpresa muy grande cuando la madre de María se acercó a la reunión de los chicos y dijo que habían comprado una mansión porque todos se iban a ir a vivir allí. Empezaron a saltar de la alegría, cogieron las maletas y salieron del hotel.
Cuando llegaron a la mansión fueron a elegir habitaciones. Estaban numeradas y cada uno cogió una. Les encantaba la idea que habían elegido los padres y nunca más volvieron a París.
FUERON MUY FELICES
ALEJANDRA DE LA ROSA Y MARÍA DOLORES CARVAJAL
UN COMIENZO VERANIEGO
Lucas , un hombre de 25 años por su cumpleaños va a un hotel de cinco estrellas llamado Stars old en Almería. Bea, una joven de 23 años, es socorrista de ese hotel . Cuando Lucas llegó, dejó las maletas en la habitación y bajó a la piscina. Como era un poco torpe se cayó a la piscina y de tal porrazo se desmayó. Bea se tiró sin pensarlo, lo saco y tuvo que hacerle el boca a boca para que reaccionara. Cuando él abrió los ojos se enamoró de tal belleza. Desde ese día iba todos los días a la piscina. Se enamoraron de tal manera que él le pidió una cita y ella sin pensarlo le dijo que sí. Finalmente salieron juntos y se marcharon a Cuba, de donde era la familia de Bea. A ella no le habían comunicado que sus padres habían fallecido hacia un par de meses. Ella se fue a su cuarto entristecida. Lucas fue tras ella y ahícomenzó la historia de amor.
Después de un largo año juntos, él decidió pedirle matrimonio. Bea afirmó sin pensarlo . Empezaron a planear la boda durante 6 meses, hasta que llegó el día de la ceremonia. En la ceremonia había mucha gente, familiares y amigos de los dos. Cuando terminó la boda se fueron de Luna de miel. Allí Bea se quedó embarazada y nada más saber la noticia partieron a Cuba de nuevo. Cuando llegaron se lo contaron a todos sus conocidos. Ellos de tal noticia de emocionaron mucho .
Tras cuatro meses supieron que eran dos gemelas. Cuando nacieron, Lucas solo pensaba en irse a vivir a Almería donde en realidad estaba toda su familia. Se lo propuso a Bea y aceptó. Al cabo de dos meses realizaron la mudanza y se fueron a vivir allí, vendiendo la casa de Cuba. Tras muchos años viviendo allí tuvieron un hijo y murieron felices.
Marta Lara y Carlos Palma
Un palpitar imprevisto
Era el primer día de instituto de Helena. Estaba muy nerviosa porque no conocía a nadie. Se acababa de mudar de Madrid a Sevilla por problemas de trabajo, a su padre le habían ofrecido un trabajo en un pueblo de Sevilla.
Cuando llegó al instituto preguntó por su aula, la ``666´´.
Al cabo de unos días, a Helena se le acercó una niña morena, con el pelo largo y liso:
-Hola ¿Cómo te llamas?- interrogó Helena.
-Valeria, ¿Y tú?- le preguntó.
-Helena. ¿Conoces a alguien de la clase?- volvió a preguntar Helena.
No, soy nueva- afirmó Valeria.
- Yo también soy nueva- confirmó Helena.
Después de una hora de charla volvió a su casa y por el camino se encontró con un niño que era rubio, guapo con los ojos azules, pero ella no le echó cuenta y siguió para delante. Se encontró con Valeria y se fueron a dar una vuelta. Valeria le iba a presentar a sus amigas/os, cuando llegó vio al chico de antes, se llamaba Hugo. Estuvieron hablando toda la tarde y saltó la chispa, pero Hugo tenía novia, cosa que a Helena le molestó. Hugo se enamoró de ella, pero no sabía cómo dejar a Valeria, que era su novia.
Valeria también le presentó a Helena un chico moreno y con los ojos marrones más alto que ella, se llamaba Álvaro. Le cayó bastante bien. Hugo se puso celoso, le pegó un guantazo a Álvaro y Helena lo defendió.
-¿Por qué lo has hecho?- preguntó confundida Helena.
- ¡POR TI!- le exclamó Hugo.
Se lanzó a Helena con un beso. Valeria los vio, pegó a Hugo, se fue corriendo y se cabreó con Helena. Y Helena se fue corriendo llorando a su casa.
Al día siguiente se volvieron a ver y hablaron sobre lo que pasó. Helena le pidió perdón a Valeria pero Valeria la quería matar y se empezaron a pegar. Helena salió de la pelea muy herida y la tuvieron que llevar al hospital. Valeria fue expulsada y la llevaron a un psicólogo para que aprendiera a controlar su temperamento.
Hugo fue a ver a Helena, pero cuando entró en la habitación, Helena había sufrido amnesia y no recordaba nada.
Hugo la volvió a besar y poco a poco Helena se fue recuperando. Recordó quién era y por qué estaba en el hospital. Después de darle el alta, Helena empezó a salir con Hugo.
Cuando los amigos de Hugo se enteraron, planearon separarlos porque ellos odiaban a Helena, pero no lo consiguieron porque su amor era más fuerte que cualquier cosa.
Saray Palacios y Juan Carlos Aguza